Durante algunos
días he reflexionado sobre diversas situaciones que rodean mi diario vivir.
Desde las metodologías de estudio que aplico en mi formación académica hasta el
panorama cultural, pasado por las
deficiencias de la educación chilena y, obviamente, el Fútbol. Diversas ideas pasaron por mi mente durante
estos días y tratare de hilarlas de forma lógica y coherente.
Analice mis metodologías de estudio después de
una conversación post-asado y pude encontrar varias formas de mejorar algunos tópicos.
Siempre que deseo comprender de buena manera un texto lo leo un par de veces y
marco con lápices de diferentes colores los conceptos claves. A veces lo hago
sin una lógica establecida y podría mejorar esta herramienta. Una debilidad es
el orden de los tiempos de estudio, lo cual es clave para el progreso
académico. También debo mejorar en la construcción de esquemas y mapas
conceptuales, los cuales son muy útiles para comprender contenidos académicos. Muchas de estas deficiencias son las que poseen
miles de estudiantes de la educación superior. Si todos tuviéramos una correcta
metodología de estudio tendríamos mejores resultados académicos. Gran parte de
estas deficiencias provienen de la educación escolar, la cual solo intenta
preparar a los alumnos para acaparar puntos en la PSU y en el SIMCE. Las
lagunas que observamos en el aprendizaje escolar es la que complica la labor de
las universidades.
Son muchos los aspectos que necesitamos
mejorar para crecer como sociedad. Estamos al debe. Lo importante es evaluarse
y tomar las medidas necesarias. Mejorando nuestra actitud a la hora de hacer
nuestras actividades diarias tendríamos mejores resultados. Espero que comprendamos que no solo es una
cuestión de lucas, sino de cómo nos educamos.
